La última edición del ‘Informe de perspectivas energéticas mundiales‘ elaborado por la Agencia Internacional de la Energía (AIE), dado a conocer esta semana indicó que la demanda de petróleo cerrará 2009 con una caída del 2,2%.
En 2008, la demanda mundial del “oro negro” había registrado una disminución del 0,2%, sin embargo de la mano con la recuperación económica mundial, y el repunte de la actividad productiva, se espera que durante 2010 la demanda de petróleo no sólo se estabilice sino que vuelva a crecer.
Las perspectivas de crecimiento según los expertos de la Agencia Internacional de la Energía, se ubicará en un 23,5% hasta 2030. En resumen, se espera que la producción global de petróleo aumente desde los 85 millones de barriles el año pasado a 105 millones en 2030. El incremento en la producción en dos tercios corresponderá a la producción de yacimientos que aún están por descubrir o explotar.
De este modo, las previsiones de la institución dependiente de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) contemplan un crecimiento anual de la demanda de petróleo del 1%. Así, en el periodo 2007-2030 la agencia espera que la demanda de carbón crezca un 53% y la de gas natural un 42%.