Como es habitual en esta época del año, el mercado centra su atención en los pronósticos vinculados a las cosechas de granos correspondientes a los grandes productores mundiales, como ser EE.UU., Argentina o Brasil.
Es por ello, que en estos últimos días ha provocado bastante “ruido”, el informe publicado por el Departamento de Agricultura de EEUU (USDA).
En el informe de marzo de este importante organismo se han tocado las previsiones respecto de los inventarios de maíz. En este caso, las existencias de maíz se incrementaron más allá de las cifras previstas por el mercado anteriormente.
En particular, desde EE.UU. se ha informado que la cosecha 2009/2010 se revisó a la baja, pasando de 334,05 a 333,53 millones de toneladas.
Estas cifras, aunque signifiquen una baja en los datos oficiales, sin embargo, quedó por encima de los 332,27 millones previstos por los operadores privados.
Desde Argentina, se elevaron las previsiones sobre las cosechas de maíz. Este incremento en la producción del país latinoamericano, se tradujo inmediatamente en un alza del saldo exportable pasando de 9,50 a 12 millones de toneladas. De esta forma Argentina se consolida como el segundo exportador mundial de maíz, e introduce una importante competencia para los granos de EE.UU.
Por último, Brasil no introdujo modificaciones en sus previsiones para la cosecha de maíz.
La competencia que Argentina representa para el maíz de EE.UU., hizo que la USDA, redujera las exportaciones norteamericanas, dato que elevó las existencias finales muy por encima de lo esperado por el mercado. Esta situación deriva, por la ley de oferta y demanda, en una disminución internacional de los precios del maíz.